Yoga y la glándula pineal: estabilidad y éxtasis
Sadhguru sobre la glándula pineal y por qué la sadhana yóguica siempre apunta primero a la estabilidad, no al éxtasis.
Sadhguru discute el significado del bindu, un punto específico en la glándula pineal, y la razón por la cual la sadhana yóguica siempre apunta primero a la estabilidad y no al éxtasis.
Cómo la glándula pineal controla nuestro estado de ánimo
Sadhguru: A medida que los científicos exploran la naturaleza de la mente humana, y a medida que encontramos mejores instrumentos para analizar la naturaleza del cerebro humano, una cosa se está volviendo muy clara para los psicólogos y neurocientíficos modernos: hay mucho más por conocer sobre la mente humana de lo que saben en este momento.
Así como hay una fisiología médica, hay toda una fisiología yóguica. Un aspecto de la fisiología yóguica que se alinea de alguna manera con las neurociencias modernas tiene que ver con la glándula pineal. Siempre se reconoció la asociación de esta glándula con el chakra agna. Hoy en día, los neurocientíficos dicen que las secreciones de la glándula pineal controlan y moderan nuestros estados de ánimo y experiencias. Si tienes una secreción pineal suficiente y muy estable, tener un ánimo agradable dentro de ti no es un problema.
Tanto las ciencias médicas como las drogas callejeras han dejado claro que los químicos pueden crear experiencias agradables y desagradables en tu interior que son muy reales para ti. Otros pueden desestimarlo como algo que te causas a ti mismo, pero en realidad, te causas todo a ti mismo. La única diferencia es si lo causas con o sin ayuda externa. Si simplemente te vuelves extático ahora mismo, te lo estás causando a ti mismo sin ayuda externa. Si causas lo mismo con estimulación externa, puede ser lo mismo en cuanto a la experiencia, pero el resultado final podría dañar el sistema. Y tal experiencia no resultará en ningún tipo de consciencia. Las experiencias inconscientes, por muy grandes que sean, no tienen importancia para nuestra evolución, crecimiento y transformación.
Muchas culturas sabían de los bindu
Un aspecto poco conocido de la fisiología yóguica, que está totalmente ausente en las ciencias médicas modernas, es algo que yo mantengo constantemente «encendido» dentro de mí, llamado el bindu. “Bindu” significa un punto diminuto. Es un punto particular de la glándula pineal rodeado de una cierta secreción. Si tocas el bindu, liberarás secreciones que harán que tu cuerpo se sienta confortable y que tú te sientas extasiado. Para activar el bindu, hay un cierto punto en la parte posterior de tu cabeza. Tantas culturas alrededor del mundo han reconocido esto, y hay un entendimiento de que ese punto necesita ser protegido y activado.
En el estilo de vida hindú, cuando los jóvenes brahmanes son iniciados en la sadhana espiritual, se afeitan el pelo del resto de la cabeza y dejan un mechón en este punto. En muchas otras partes del mundo, si las personas están haciendo un cierto tipo de actividad que creen que es espiritual, quieren que ese lugar esté cubierto, por lo que comenzaron a usar pequeños gorros o algún tipo de tela. En todas partes del mundo, en algún momento algunas personas habrían sido conscientes y probablemente hablaron de ello. Realmente no sé lo que han dicho, pero he notado que la gente hace estas cosas. Si hay alguien que viene de la cultura judía, por ejemplo, ¿te han dicho algo específico sobre por qué debes usar este gorrito?
Meditador 1: Cuando haces una práctica espiritual, vas a la sinagoga y te pones el gorro para mostrar que eres solo un ser humano y no eres lo divino. Entonces, es un signo de respeto y una separación entre tú y el Dios que estás adorando.
Sadhguru: ¿Alguien más tiene algo que decir?
Meditador 2: Es más una conexión, para recordarte que hay una divinidad. Siempre lo llevas puesto para que no lo olvides. No es necesariamente una separación, es más bien un recordatorio de la divinidad dentro de ti o a tu alrededor.
Sadhguru: No sé cuándo los neurocirujanos llegarán al bindu. Incluso si se encuentran con él, como es tan pequeño, pueden ignorarlo. Pero si prestas atención a tu sistema, está ahí todo el tiempo. ¡Pero no empieces a imaginar estas cosas!
Ambrosía y veneno
Verás, muchas veces cuando las personas están en ciertos procesos meditativos, se sienten abrumadas porque la «copa de ambrosía» en su interior se derrama un poco. Aún no han aprendido a beber de ella a sorbos. Si le das un vaso lleno de agua a un niño pequeño, lo derramará por todos lados cuando lo beba. Del mismo modo, su copa se está derramando porque todavía no saben cómo beber con cuidado. Si hacen la sadhana necesaria, lentamente después de algún tiempo, podrían beber conscientemente de ella. Una vez que puedes beber conscientemente de ella, cada célula del cuerpo y cada momento de tu vida es un éxtasis.
Pero el bindu tiene dos caras. Estas dos interpretaciones que tú diste son interesantes. Ambas podrían ser correctas; distorsionadas, pero podrían venir de un cierto entendimiento. El bindu tiene otro punto en él que también tiene una secreción pero es venenosa. Si derramas el lado equivocado de la copa, entonces se esparcirá veneno por el sistema. No es como el veneno que bebes. Se propagará por el sistema de tal manera que, aparentemente sin razón alguna, eres miserable. Mucha gente se ha hecho eso a sí misma. Podrías llamarlo depresión. Eres miserable porque derramaste el lado equivocado de la copa haciendo cosas impropias con la vida.
Hay muchas culturas alrededor del mundo que han sido conscientes. Algunos llevan gorros, otros tienen casquetes, otros han tenido otro tipo de cuidados. Notarás que el nivel de desequilibrio mental en esas culturas es siempre menor.
Primero la estabilidad, luego el éxtasis
No importa lo que persigas en la vida —dinero, abundancia, poder, Dios o la iluminación— ¿qué es lo que estás buscando? Esencialmente, lo que estás buscando es la máxima sensación de dulzura dentro de ti. La encuentras accidentalmente o conscientemente, esa es la elección que tienes.
Hay muchos procesos y métodos sencillos que están ideados, no para ir hacia esa ambrosía que está en cada cerebro humano, sino para traer el cimiento necesario dentro de ti de modo que, cuando llegues a ella a través de la gracia, no te vuelvas loco. Demasiada dulzura puede volverte loco, a menos que estés sentado sobre una base estable.
En el yoga, las fases iniciales de la sadhana que haces apuntan a la estabilidad, no al éxtasis. La estabilidad es más importante que el éxtasis. Si el éxtasis viene antes que la estabilidad, te estás dirigiendo a una colisión. Si el éxtasis viene después de la estabilidad, es fantástico. El sistema yóguico ha ideado las prácticas de tal manera que, para empezar, todo apunta a la estabilidad.
Los procesos del éxtasis nunca fueron escritos
Los procesos del éxtasis nunca fueron escritos o transmitidos como una enseñanza. Es solo en la presencia de un cierto ser que esas cosas suceden —porque son muy subjetivas, es mejor que no se escriban—. En algunos libros sobre tantra, han intentado escribirlo, lo cual me parece muy irresponsable. Supongamos que lees un libro en el que los dos primeros capítulos hablan de algunas prácticas sencillas para estabilizarte y los últimos cinco capítulos hablan de prácticas sencillas para llevarte a niveles de éxtasis: ¿cuáles harás? Estarás buscando problemas. Estas son normalmente personas ignorantes que han hecho algunas conjeturas sobre la realidad y han intentado escribir algo al respecto. La gente no buscará la estabilidad, sino el éxtasis —y se quebrarán—. No puedes sostener tu sistema si está demasiado extasiado a menos que ya hayas trabajado en tu estabilidad.
Nunca aspires a nada que no esté todavía en tu percepción porque aspirarás a las cosas equivocadas. Solo haz tu sadhana. Por eso las tradiciones siempre han insistido en confiar; simplemente porque, si explicamos algo de antemano, naturalmente te imaginas las cosas equivocadas y vas por ellas. No te preocupes por eso. Solo haz la práctica todos los días. Producirá resultados. Si no supieras cómo crece una planta, si te mostrara un montículo de estiércol y la hermosa flor y dijera: «Estas dos cosas son iguales. Esto sale de eso», ¿me creerías? No habría manera de convencerte. Se necesita un loco sentido de confianza. Por eso no solemos hablar de todas esas cosas. Porque esto no se puede trabajar lógicamente. Esto necesita un poco de ajuste de la vida.
Un hombre entró en la corte. Era el acusado. El juez lo miró y le preguntó: «¿Tiene un abogado?» El hombre dijo: «No, pero tengo algunos buenos amigos en el jurado».
Así es como es. No puedes resolver esto lógicamente. Por eso el Gurú entró en escena, porque se necesita un poco de ajuste. Sin el ajuste, no saltarás. Te quedarás de esta parte para siempre. Sin un poco de ajuste, de impulso o de empuje, no cruzarás la barrera.
Nota del editor: La palabra «tantra» crea muchos conceptos erróneos en la mentalidad moderna: de inmoralidad, sexo y actividad clandestina. Disfruta de este video sobre el tema. https://www.youtube.com/watch?v=gr1D1HEb-gk&t=1s