Tabla de Contenido 
Motivos de divorcio
El amor es sobre ti
¿Qué es el divorcio?
Divorcio y segundas nupcias
Cuando el divorcio es inevitable
Efectos del nuevo matrimonio en un niño
Ser madre soltera tras el divorcio
¿Está bien volver a casarse después del divorcio?

Motivos de divorcio

Pregunta: Cuando el matrimonio se convierte en una batalla agotadora, ¿no es mejor divorciarse?

 Sadhguru: Si pudiéramos vivir sin pelear con la otra persona, entonces no surgiría el asunto del divorcio. No estás batallando contra alguien de la calle; estás batallando contra alguien que te pareció la persona más maravillosa en algún momento. Esta confrontación no se debe a que esa persona se haya vuelto fea repentinamente. Esta batalla aparece porque, a medida que crecemos, suceden ciertos cambios y no estamos dispuestos a aceptarlos. Dos personas crecen en direcciones diferentes y eso está bien. No tenemos que ser iguales para estar juntos. No es necesario que dos personas tengan los mismos gustos, hagan lo mismo o sientan lo mismo. Las personas pueden ser diametralmente diferentes y seguir juntas. Hay cierta inmadurez en pensar que alguien debe ser igual que tú para estar contigo. No hay dos individuos exactamente iguales en ningún lugar del mundo. Habrá alguna diferencia en algún aspecto de la vida entre dos individuos. 

Olvídate del hombre de la calle, ¿no tienes tú muchas capas de resistencia incluso para la persona más cercana de tu vida?

Robert Owen, un autor estadounidense, dijo: «Todos en el mundo son raros menos tú y yo, aunque tú también pareces un poco extraño». Por favor, observa tu mente, y verás. Si te guías por tu intelecto, nadie en el mundo está bien. Solo examina de cerca a la persona más querida de tu vida y observa cuántas capas de resistencia tienes hacia esa persona. Olvídate del hombre de la calle, ¿no tienes muchas capas de resistencia incluso para la persona más cercana de tu vida? Eso significa que nadie en el mundo está bien para ti. Si nadie está bien, no es cuestión de estar bien o no estar bien, es solo que estás enfermando psicológicamente. Uno de los primeros signos de enfermedad psicológica es que empiezas a pensar que nadie está bien. ¡Parece que ya has dado el primer paso! Si avanzas más en esto, surgirán problemas mayores.

No hay ningún problema en que dos personas diferentes tengan dos formas distintas de entender y hacer las cosas. Es la emoción subyacente la que mantiene unidas a las personas. Después de todo, ustedes se unieron buscando el bienestar del otro. Entendamos esto. Lo que ahora se hace pasar por amor no suele ser más que un simple plan de beneficio mutuo. Tú tienes necesidades, la otra persona tiene otras y las personas se juntan para satisfacer estas necesidades. Las necesidades pueden ser diversas: físicas, psicológicas, emocionales, sociales o económicas. En el momento en que tu necesidad no se satisface adecuadamente, se acabó. Ese es el camino que estás tomando. No hay nada más en la relación. Tú quieres obtener el máximo provecho de la otra persona y la otra persona quiere exprimir el máximo provecho de ti. Esta es una batalla, no una relación amorosa.

El amor es sobre ti

Lo que llamas amor no tiene que ver con alguien más, tiene que ver contigo, con cómo eres dentro de ti. Si tu cuerpo se vuelve agradable, lo llamamos salud y placer. Si tu mente se vuelve agradable, lo llamamos felicidad y alegría. Si tus emociones se vuelven muy agradables, a esto lo llamamos amor. Si tus energías se vuelven muy agradables, lo llamamos dicha. Estas son ciertas formas de ser dentro de ti mismo. No tienen nada que ver con nadie, pero tú las estás enlazando a alguien. Si alguien tiene que hacer que tu mente, tus emociones y tu cuerpo sean agradables, esto no va a suceder por mucho tiempo. Ningún ser humano puede mantener eso para siempre. Quizás cuando te acaban de conocer, por tres días, hagan todo lo posible por mantener tu mente, emoción y cuerpo agradables; pero nadie puede sostener eso. Simplemente, no es posible para ningún ser humano.

Así que debes aprender a mantener tu mente, tus emociones y tu cuerpo agradables. Si tus emociones son agradables, eres amoroso por ti mismo y, sean cuales sean las diferencias, todo está bien. Cuando eso está ausente, cada pequeña diferencia es un gran problema. La gente solo puede estar cerca de ti cuando hay una cierta agradabilidad en ti.

¿Qué es el divorcio?

Pregunta: Ahora estoy pasando por un divorcio y siento como si una parte de mí estuviera muriendo. ¿Cómo puedo superar esto con gracia?

Sadhguru: Lo que llamas «yo», en este momento, es un enorme volumen de memoria. Tu cuerpo es como es, simplemente, por la memoria genética que lleva. Tienes la nariz de tu madre y la complexión de tu padre simplemente porque lo que llamas tu cuerpo es una compleja amalgama de memoria. En tu cuerpo vive una memoria muy antigua. Lo que ahora llamas «mi mente» es cien por ciento memoria. Eres un enorme montón de memoria en muchos sentidos, y la memoria entra en ti por diferentes vías. Recolectas memoria a través de lo que ves, oyes, hueles, saboreas y tocas. De estas cinco formas diferentes de acumular memoria, lo que ves y lo que tocas son las formas más profundas de memoria. Especialmente lo que tocas crea un cierto nivel de memoria en el sistema.

El divorcio es una muerte voluntaria. Has decidido matar algo que, de alguna manera, forma parte de ti.

Un cónyuge significa que te han tocado, y hay un cierto nivel de memoria. Un divorcio significa que, de alguna manera, estás intentando arrancarte esa memoria y eso no va a ser fácil por varias razones. Pero, al mismo tiempo, el hecho mismo de que estés pasando por un divorcio significa que quieres acabar con esa memoria de alguna manera. Tal vez no quieras borrar esa memoria pero, por la razón que sea, poco a poco has empezado a experimentar a alguien que formó parte de tu vida en muchos aspectos como un equipaje que no estás dispuesto a cargar. Quieres mantener el equipaje a un lado, pero descubres que el equipaje no es algo que llevas voluntariamente, es algo que se te pega compulsivamente. Cualquier cosa que se te pegue compulsivamente, si intentas arrancarla, habrá dolor.

La memoria de tu cónyuge se ha acumulado, no puedes deshacerte de eso tan fácilmente. Aunque te encuentres en un estado de equilibrio emocional, psicológico, en el que puedas afrontarlo, aun así verás que todo el sistema pasará, invariablemente, por un cierto nivel de sufrimiento. Especialmente, cuando llega la muerte, si han vivido juntos el tiempo suficiente, verás que la memoria de tu cónyuge actúa en cada célula de tu cuerpo. No es solo un proceso emocional y psicológico; es un proceso bastante físico.

El divorcio es una muerte voluntaria. Has decidido matar algo que, de algún modo, forma parte de ti. Es por esta razón, con esta comprensión de la existencia y de la forma en que funciona el sistema, que siempre te dijeron: «Hasta que la muerte los separe, no se separarán», porque hay una memoria física en esto, y el cuerpo no tiene el equilibrio de la mente. La mente puede decidir y girarse, pero el cuerpo no puede girar. Cuanta más memoria acumules en él, más se confunde.

Divorcio y segundas nupcias

La mayoría de las personas piensan que la mejor manera de manejar un divorcio es lanzarse inmediatamente en otra relación del mismo tipo. Al hacer esto causarás mucho más conflicto y confusión en el sistema. Es sumamente importante que el cuerpo disponga de tiempo suficiente para trabajar la memoria, para mantenerla a cierta distancia. De lo contrario, te conducirás a un espacio en el que estar en paz y alegre se convertirá en algo extremadamente difícil de hacer en tu vida.

Cuando el divorcio es inevitable

Si el divorcio se puede evitar, sería lo mejor; pero, por alguna razón, has llegado a esa situación en la que has elegido divorciarte. Necesitas entender que el divorcio, básicamente, significa que has elegido matar algo que forma parte de ti.

Nuestra interdependencia existe solo en función de nuestras necesidades externas, pero nuestra existencia interior es completa por sí misma.

Dos personas que han compartido su emoción, su cuerpo, sus sensaciones y sus espacios vitales, romper eso es casi como desgarrarse a uno mismo porque dos memorias se han fusionado en muchos sentidos. Aunque hayas llegado casi a un punto en el que ya no soportas a esa persona, sigue doliendo, simplemente porque estás intentando arrancarte una memoria, la cual eres tú; porque existes como un manojo de memorias.

Solo te divorcias de tu cónyuge, no necesitas divorciarte de ti mismo. Pero tienes que entender que ya te has divorciado de ti mismo. Tu existencia ha sido nutrida al crear un vínculo, una asociación o una atadura —según cómo lo hayas conducido—, para sentirte completo de alguna manera. La mayoría de las asociaciones de esta naturaleza se crean porque te sientes insuficiente e incompleto por ti mismo. Pero la vida no es así. Eres un proceso vital completo en sí mismo. No necesita ninguna ayuda del exterior.

Si has llegado a tal situación de divorcio, es tiempo de volverte hacia dentro y mirar. Es tiempo de encontrar lo completa que es esta vida. Es tiempo de descubrir que este ser es un ser completo y que no necesita ninguna ayuda externa para ser como es. Para conducir nuestra vida en sociedad, somos interdependientes; pero la existencia fundamental de este ser, el equilibrio, el espacio y la posibilidad de lo que es, es un proceso completo por sí mismo. Nuestra interdependencia solo existe en función de nuestras necesidades externas, pero nuestra existencia interior está completa por sí misma. Si te estás divorciando de tu cónyuge, eso ya es suficientemente malo, no te divorcies de ti mismo.

Efectos del nuevo matrimonio en un niño

Pregunta: Sadhguru, ya estoy divorciada y tengo un hijo de ocho años. A veces, me siento carente de amor y con necesidad de volver a casarme. Mi hijo sigue preguntándose por qué no tiene una figura paterna en casa. Estoy muy confundida, por favor, ayúdame.

Sadhguru:En el mundo de hoy, un niño no es un evento automático después del matrimonio. Hubo un tiempo en que no había otra manera. Si te casabas, los hijos no paraban de llegar. Pero, en el mundo actual, tener un hijo no es algo automático; generalmente, se planifica. Debes entender que, una vez que tienes un hijo, tienes un proyecto de veinte años. Si tu hijo es muy competente, es un proyecto de quince o dieciséis años. Cuando eliges o decides tener un hijo, debes estar preparado para un proyecto de, al menos, quince años. Si no tienes ese compromiso, no deberías meterte en esto; no es necesario, porque ningún niño está llamando a tu vientre y diciendo: «Hazme nacer». Si no estás segura de poder proporcionar este tipo de apoyo, no deberías meterte en esa desventura de engendrar hijos.

Ser madre soltera tras el divorcio

Pensar que un matrimonio más bastará para que el niño se estabilice es una idea muy equivocada. No digo que no lo vaya a estabilizar, puede que sí. Pero pensar: «El padre biológico del niño no funcionó, si traigo a otro hombre, todo va a salir bien», es una idea muy peligrosa. Yo diría que este tipo de cosas funcionan solo el diez por ciento de las veces. El noventa por ciento del tiempo crean más problemas que soluciones. No cuestiono por qué rompiste tu matrimonio, eso es asunto tuyo. Si has elegido romperlo, al menos debes volverte competente para desempeñar el rol de ser un padre o madre completo para el niño, en todos los sentidos posibles. Pero, como estás anhelando otra cosa, el niño también anhela contigo.

Por favor, no eduques a tus hijos de forma tan desamparada, que siempre estén añorando a alguien que no está ahí. ¿Cuánto tiempo quiere pasar tu hijo de ocho años contigo? Casi nada. Está ocupado con sus propias cosas, a menos que lo hayas convertido en una criatura tan desamparada que tenga que aferrarse a ti todo el tiempo; de lo contrario, tiene sus propias cosas que hacer. Esa es la naturaleza de la vida; los niños tienen sus propias cosas que hacer. Solo tienes que mantener un ojo abierto para ver que no terminen haciendo cosas perjudiciales para ellos mismos. No tienen que hacerlo todo contigo.

¿Está bien volver a casarse después del divorcio?

Así que, si quieres volver a casarte, es asunto tuyo. Es una elección que tú tienes que tomar. No se la delegues al niño. Prepara al niño de tal manera que no te necesite ni a ti ni a su padre. Que él esté bien por sí mismo. Solo necesita tu apoyo y cuidados, nada más. Hagas lo que hagas, habrá una consecuencia. Si no te casas, habrá un tipo de consecuencia. Si te vuelves a casar, habrá otro tipo de consecuencia —una que ya has experimentado, por lo que puede que seas capaz de manejarla mejor—; no lo sabemos. Pero ambas tendrán sus consecuencias. Y las consecuencias no tienen por qué ser necesariamente agradables o desagradables. Simplemente depende de cómo las asumas. Si asumes la consecuencia con alegría, será un trabajo de amor. De lo contrario, será solo trabajo.

   

Nota del editor

En este video, Sadhguru analiza por qué el final de una relación a menudo causa dolor y explica cómo seguir adelante airosamente con la vida, en tal situación.