Juhi Chawla: Sadhguru, el tema de hoy es «El amor y la vida», y me gustaría saber... Algunos maestros espirituales y gurús dicen: «Debes amar, pero debes desapegarte».

Sadhguru: Una forma simple de hacer que continúes viniendo es darte una enseñanza que nunca puedas seguir. «Debes amar, pero debes desapegarte» —ahora tienes que seguir viniendo a la consulta, una y otra vez—. Yo diría: entrégate a tu relación de amor. Si estás dispuesta a morir en el proceso, sucederá algo que valga la pena. Esto vale para todo, ya sea tu amor, tu vida, tu trabajo o lo que sea. Si no te entregas a ello por completo, nunca lo conocerás realmente. «Ama, pero desapégate». ¿Para qué quieres amar entonces? Amas solo porque quieres incluir a alguien más como parte de ti. Si tratas de amar, pero ser desapegado, tendrás que volver a la consulta todos los días. Es como el trabajo de un psiquiatra: todos los días, tienes que ir y sentarte en el sofá. Necesitas tratamiento y hay que pagar.

Juhi Chawla: ¿De modo que se puede amar y apegarse?

Sadhguru: Yo no dije eso… Veamos de dónde viene esta necesidad de amor en un ser humano. Los seres humanos anhelan constantemente ser algo más de lo que son ahora mismo. Si esto encuentra una simple expresión física, lo llamamos sexualidad. Sexualidad significa que físicamente tratas de hacer que algo que no es una parte de ti sea parte de ti. Por unos instantes, puede que lo logres. Si tratas de hacerlo mentalmente, se etiqueta como codicia, conquista o, tal vez, ir de compras. Algunas personas van a la conquista con espadas y pistolas; ¡otras van con chequeras, efectivo y tarjetas de crédito!

Tanto si quieres riqueza u otra cosa, todo el esfuerzo consiste en hacer que algo que no eres tú sea tuyo. Si intentas esto a nivel emocional, lo llamamos amor. Estás tratando, emocionalmente, de hacer que alguien sea una parte de ti. Si lo haces conscientemente, lo llamamos yoga. «Yoga» significa 'unión'. Todos los demás métodos para incluir a alguien o algo como parte de ti tienen su propia belleza, pero también sus propias limitaciones. No hay nada de bueno o malo en ello, lo que ocurre es que solo funcionará brevemente, no para siempre. Cuando te das cuenta de eso, conscientemente, tratas de incluir. Cuando conscientemente te vuelves inclusivo, si te sientas aquí y experimentas todo como si fueras tú, entonces, eres un yogui. Esta es una relación de amor que es exitosa.