Transcripción del darshan con Sadhguru, el 16 de octubre de 2016, en el Instituto Isha de Ciencias Internas.

S ea cual sea la esfera de la vida en la que te encuentres, hay incentivos; hay un incentivo para todo. Seguro que has oído hablar de «pagar por jugar». Incluso si tienes que hablar... Desde la infancia, para que comas, hay un incentivo. Para que estudies, te crearán un incentivo. Para que vayas a la escuela, te crearán un incentivo. Para que reces, por supuesto que siempre hay un incentivo. Todo tipo de incentivos. «Si haces esto, obtendrás eso. Si no haces esto, obtendrás algo diferente». La zanahoria y el palo, el cielo y el infierno: todos son incentivos de diferentes tipos.

Esto sucedió: había un judío viejo, cuyo hijo era cardiólogo. Y resulta que este hombre tenía un problema cardíaco, y tuvo que someterse a una cirugía mayor. Su hijo decidió realizar la cirugía él mismo. Justo antes de ponerle la anestesia, el anciano dijo: «Solo para recordarte: Dios no lo permita, pero, si algo sale mal, debes saber que tu madre irá a vivir contigo y con tu esposa». Incentivos para hacer la cirugía correctamente. Para todo, hay un premio. Pero debes entender que, al tratar de obtener todos estos premios, pierdes lo más fundamental. Si vives tu vida maravillosamente, no hay premio para eso. Nadie te dará una medalla de oro al final. De hecho, si vives demasiado bien, es posible que ni siquiera se preocupen por enviarte al cielo; porque ya viviste bien. La mayoría de los seres humanos no han saboreado la vida. La mayor parte del tiempo, sus vidas se gastan en acumular cosas o acumular pensamientos, emociones o cosas. «No, Sadhguru, solo pienso en ti». Alguien me dice esto; eso es aún peor. Encontraste un nuevo juguete; no tiene importancia. Lo que piensas solo es importante si se vuelve una herramienta de transformación. Lo que piensas solo es importante si conduce al florecimiento de la vida que eres. Si lo que piensas es una distracción, si lo que piensas es un sustituto de la vida que eres, entonces no sirve de nada. No solo no sirve: es destructivo.

Hoy en día, le hacemos esto al mundo de muchas maneras. Nos lo estamos haciendo a nosotros mismos y también al resto de la humanidad de tantas maneras diferentes. No hablo de ti. Ninguna de ustedes parece una modelo de pasarela. Quiero decir que es algo bueno. Te ves como una mujer normal, como deberían verse las mujeres. Porque la mayoría de las modelos profesionales no lucen como las ves en las fotos, porque les hacen photoshop. Todo está retocado. Todo se retoca de tal manera que, desafortunadamente, muchas mujeres están volviéndose locas intentando ser como las de photoshop. No saben que lo que se imprime en las revistas está retocado con photoshop. Pobres mujeres, intentan desesperadamente verse como algo físicamente imposible. Muchas se han vuelto locas; se han causado mucha desdicha y tortura a sí mismas al someterse al bisturí de un cirujano. Muchas incluso se han quitado la vida. Todo porque tenemos expectativas poco realistas sobre cómo debería ser alguien, o sobre cómo debería ser algo. Porque, cuando hablamos del cuerpo, podríamos llamarte «algo»; porque es físico.

Solo puedes ser consciente de la realidad. No puedes ser consciente de lo que no es real.

Los hombres intentan ser superhombres. Las mujeres intentan ser como las de photoshop. Esto es vida (se señala a sí mismo). La única intención que está naturalmente contenida en ella es que necesita florecer al máximo. Lo máximo para esta vida no es ser ni mejor ni peor que alguien más. Está completa por sí misma. Esta es una vida plena. No es una vida que haya surgido en comparación con algo. Es una vida completa por sí misma. Pero, hoy en día, la supervivencia social se ha vuelto más importante que la supervivencia existencial. Existencialmente, esta es una vida completa. Socialmente, esta es una vida comparativa; sobrevive solo por la comparación; sobrevive solo por las opiniones de otras personas. Son opiniones de personas que no tienen idea de quiénes son, en primer lugar. Están ocupadas creando opiniones porque, una vez que vives en una sociedad, debes tener una opinión sobre todo. De lo contrario, no sirves. Porque tener una opinión se considera inteligente. Déjame decirte que tener una opinión sobre cualquier cosa significa que simplemente eres estúpido, porque estás tratando de construir una realidad propia y no ves la realidad tal como es. Si tienes que vivir aquí sin formar una opinión sobre nada, la única manera en que puedes existir es con una enorme atención.

La atención, una atención sin prejuicios, abre puertas. Las opiniones cierran puertas en tu percepción. «Pues, esto es así; eso es así; aquello es así». Se cierran las puertas. Si simplemente prestas atención, las puertas seguirán abriéndose. La manera de abrir las puertas de la existencia, la manera de abrir las puertas a cada dimensión de la vida, es con un intenso sentido de atención. Sin intención, sin incentivos, simplemente la atención abrirá puertas. Pero, en el momento en que formas una opinión sobre algo o alguien, esas puertas se cierran para ti. Vivir aquí, en esta existencia, con todas las puertas abiertas, es inteligencia. Vivir aquí, cerrando sistemáticamente todas las puertas de la existencia para ti mismo, es una tumba; es un ataúd. Una vez que tienes una opinión y no puedes cambiarla, es como la tapa de un ataúd. Una vez que está cerrado, no puedes abrirlo. Porque, desde adentro, no hay forma de abrirlo. Una vez que estás en un ataúd, estás a la merced de alguien más. Alguien más puede abrirlo. Pero tú no puedes. Entonces estamos ocupados buscando constantemente la opinión de otras personas, intentando convertir esto (se señala a sí mismo) en algo sustancial con los pensamientos, ideas, opiniones y emociones de otras personas. La vida interior no puede sostenerse con opiniones. La vida no se sostiene con tu pensamiento ni con el pensamiento de otra persona, ni con tu emoción o con la emoción de otra persona. Porque está más allá de todo eso. Esta vida necesita reverberar con el resto de la creación. Es solo al estar en sintonía con la creación y con la fuente de la creación que esta vida florecerá. De lo contrario, adquirirá muchas cosas, muchísimas cosas. Un día, el hacer malabares con todas estas cosas que has acumulado te volverá loco. Por lo general, mueres antes de eso. Es algo bueno, sabes.

Si haces que todos vivan 200 años, créeme, el 90% de las personas se volverán locas. Afortunadamente, mueres antes de eso. Esto sucedió. Una mujer de 84 años fue a ver a un abogado de divorcios y le dijo: «Quiero el divorcio». Él la miró. «Señora, a su edad, ¿quiere un divorcio? ¿Cuántos años tiene su esposo?». «Él tiene 89». «¿Cuánto tiempo han estado casados?». «67 años». «Pero, ahora, después de 67 años, cuando usted tiene 84 y él tiene 89, ¿quiere un divorcio? ¿Por qué?». Ella dijo: «Ya fue suficiente». Algún día, tienes que decir: «Ya es suficiente»; de lo contrario, te volverás loco. Pero, antes de decirlo, usualmente llega una compañera compasiva llamada muerte. De lo contrario, no tienes el sentido común de decir: «Ya fue suficiente». Alguien tiene que poner un punto final por ti. Si pasa esto, si pasa eso, si pasa aquello... ¿cuántas veces debería decir «si»? Si tuvieras algo de sentido común, dirías: «Sadhguru, no digas "si"; solo di "cuando"». Lo dices tres veces: eso son tres vidas. «Si esto, si eso, si aquello...». Qué desperdicio. Si recobras el sentido, ¿cuántas veces más? ¿Siete veces? Elige todos los números auspiciosos. El cero es muy auspicioso porque es la madre de las matemáticas. Si recobras el sentido común... Cuando digo «sentido», no me refiero a la palabra «sentido» como la sueles usar. Solo porque tus sentidos están funcionando, tienes algún sentido de percepción, ¿no es así? Percibes la luz y la oscuridad solo porque tus ojos están funcionando, ¿no es así? Entonces, «recobrar el sentido» quiere decir que no sacas conclusiones basadas en las acumulaciones que has reunido. No sacas una conclusión basándote en tus ideas, tus pensamientos, tus emociones, las impresiones de la vida sobre ti. Simplemente recobraste el sentido. Ves todo tal como es.

¿Entiendes? La expresión «recobrar el sentido» no significa que hayas alcanzado alguna nueva inteligencia. No puedes. ¿De dónde proviene la inteligencia? No existe tal cosa. Es simplemente que dejaste a un lado tus tonterías acumuladas y comenzaste a ver las cosas, escuchar las cosas, oler las cosas, probar y tocar las cosas tal como son; no como las imaginabas, no como las recuerdas, sino tal como son. Si simplemente ves todo tal como es, recobras el sentido. Entonces, si recobras el sentido, significa que puedes sentarte aquí simplemente como vida. No como hombre, no como mujer, no como esto o aquello que crees que eres, sino simplemente como vida, si simplemente te sientas aquí. Afortunadamente, tenemos sentidos a través de los cuales podemos percibir. La creación no tenía por qué darnos esto, ¿sabes? Porque somos solo una partícula en este cosmos. Pero, para esta partícula, ¡qué sentidos fantásticos tienes para ver, oír, oler, probar y tocar las cosas! ¿No es fantástico? Así que, el día que recobres el sentido, simplemente verás las cosas tal como son, no como crees que son; el día que recobres el sentido, verás todo tal como es. Es entonces que, cuando ves un árbol, ves la vida que es. No lo llamarás «madera». La madera es tu idea, ¿no es así? La madera es tu necesidad. Necesitas muebles en casa, por eso la «madera». De lo contrario, verías una vida fabulosa en pie ahí, ¿no es así? Mucho más grande que tú. Nunca tomaste un árbol en tu regazo, pero siempre pudiste ir y pararte a la sombra del árbol. Así que es una vida mucho más grande que tú. Pero tienes la necesidad de muebles, así que es un trozo de madera. Del mismo modo... No quiero entrar en otros ejemplos —la vida se pondría fea—.

No puedes vivir mañana. Solo puedes vivir ahora.

Hay demasiadas cosas... Por tus necesidades, por tus compulsiones, has cosificado demasiadas cosas. Eso significa que no eres sensato. Si lo fueras, verías todo tal como es. Ahora bien, este proceso de espiritualidad, si es para cambiar actitudes, no sirve. Digamos que te vuelves más amoroso; uso esto como ejemplo puesto que ahora, en Estados Unidos, se habla mucho de lo importante que es «amar al prójimo». Él se ríe porque sabe quién es el «prójimo». Si tus pensamientos y emociones no son instrumentos para tu liberación, sino que son acumulaciones que te estancarán después de algún tiempo, acumulaciones que te harán prejuicioso... Si son acumulaciones que te niegan una experiencia de vida, entonces, estás mejor sin esos pensamientos y emociones. «No, Sadhguru. Tengo emociones puras hacia ti». Donde sea que vaya, la gente dice: «Sadhguru, eres genial», «Sadhguru, te amo». Si tus pensamientos te ayudan, si una cierta orientación de tu pensamiento te ayuda a florecer, te bendigo: quédate ahí. Si tus emociones te ayudan a florecer, te bendigo: quédate en esa emoción. Si tus ideas son solo dispositivos para que florezcas, bendigo esas ideas: deja que estén ahí. Si tus acciones también son instrumentos para que florezcas, apoyo esas acciones. Si crees que soy genial, si crees que me amas, si me veneras... Solo si te ayuda a florecer, apoyo todo eso. Si es solo una nueva manera más de enredarte, no tengo ninguna consideración por tu amor. Porque no valoro tu pensamiento ni tu emoción ni nada, excepto la vida que eres.

Mi única intención es que florezcas en una vida plena, porque solo en eso consiste esta vida. Que tengas emociones, que tengas pensamientos o que tengas otras tonterías: nada de eso es significativo en términos de vida. Si no me entiendes ahora, cuando te abrace la muerte, sabrás que no significa ni una maldita cosa. Pero, si esta vida ha florecido, si ha florecido de verdad, entonces verás que la Sra. Muerte no se cruza en tu camino; no puede cruzarse en tu camino. Porque esta es una vida que ha florecido completamente. Cuando la vida florece completamente, no le pertenece a nada. Cuando no le pertenece a nada, no se puede quitar. Porque perteneces aquí, te pueden llevar a otra parte. Porque estás atrapado aquí, te puedes liberar. Si no estás atrapado, si no perteneces a nada, te has vuelto un florecimiento de vida. Porque, cuando florece la vida, desaparecen los límites de la individualidad. Una vez que desaparecen los límites de la individualidad, vives ambas al mismo tiempo: la vida y la muerte. La vida y la muerte son simples transacciones en marcha.

Hace apenas una hora, estaba sentado allí, pensando; olvidé que hoy había un darshan. Y, de repente, cuando alguien me lo recordó, dije: «Está bien, déjame escribir algo», y este es un pequeño poema llamado «Transacciones de vida».

Transacciones de vida

Mientras los árboles adquieren muchos matices,
Una colorida celebración de la
Muerte que se aproxima. Mientras una colorida
hoja baja flotando para impregnar
la tierra, que solo reclama
el alimento que infundió
al árbol. Las transacciones de la vida
y la muerte. Una continuidad de ciclos
del mundo físico. Cuando se realizan
con la exuberancia de la vida, da
Una sensación de alegría. Cuando carecen
de la exuberancia necesaria, la lasitud
toma el mando para convertirse en una
muerte mórbida y depresiva. Deja la hoja
caer. Caer voluntariamente, cuando
es tiempo, es Gracia. Conoce la Gracia
de caer a tiempo. Y no se trata de
la colorida hoja, sino de la vida.

Estos ciclos de otoño e invierno y primavera y verano; estos ciclos de infancia, juventud... ¿debo mencionar la mediana edad? Edad madura, vejez y te empacan. Empacas correctamente, al menos en este país. Para eso también necesitas madera. Así que, infancia, juventud, mediana edad, vejez y muerte. De nuevo, transacciones de vida y muerte; ciclos de la existencia física. Solo querrás elevarte por encima de estos ciclos cuando te vuelvas consciente. Estoy usando la palabra «consciente» no como otro nivel de proceso de pensamiento, como se habla o se propaga en el mundo. Hoy en día la consciencia, la palabra «consciencia» de los años sesenta —que significaba otra cosa en aquella época—, ahora se ha sustituido por «mindfulness» (atención plena). . . «No, Sadhguru. Estoy pensando en Dios». No importa. No importa en qué estés pensando. La unica pregunta es: ¿funciona tu pensamiento como una forma de fertilizar tu florecimiento? «No, amo a Dios». No significa una maldita cosa. ¿Tu emoción facilita el florecimiento de quien eres? «No, yo no hago cosas malas. Solo vengo al templo y rezo». No significa una maldita cosa. ¿Tus acciones te llevan a florecer? ¿Tu pensamiento, emoción y acción facilitan el florecimiento de esta vida? ¿O le producen constipación? ¿La convierten en una opinión? ¿Te hacen sentir mejor que los demás? ¿O solo te convierte en una vida exuberante y reverberante?

Así que, lo que piensas, por lo que te emocionas —particularmente si es hacia mí—, todo esto es relevante solo si estás usando estos pensamientos, esta emoción, estas acciones para poder reverberar conmigo. La razón por la que uso la palabra «reverberar» es porque solo puedes reverberar con la realidad. Puedes pensar falsedades. Puedes emocionarte por cosas que no existen. Pero no puedes reverberar con lo que no existe. Ser consciente significa que solo puedes ser consciente de lo que realmente es. No puedes ser consciente de algo que no está ahí. Pero puedes pensar en algo que no está ahí. Puedes emocionarte por algo que no está ahí. Puedes seguir realizando acciones para algo que ni siquiera existe. Pero no puedes ser consciente de aquello que no existe. Ser consciente significa que tu estúpida mente se ha hecho a un lado. Que tu mente esté «llena» o que tengas «atención plena» no significa que seas consciente. Solo puedes ser consciente de la realidad. No puedes ser consciente de aquello que no es real. «Bueno, soy muy consciente de mi cuerpo». Si prestas suficiente atención, verás que, en tu misma atención, tu cuerpo se disolverá. Tu cuerpo no puede soportar demasiada atención, quiero que lo sepas. Lo sé, hoy en día, todo lo relacionado con el cuerpo es para buscar atención. Pero tu cuerpo no puede soportar demasiada atención. Si prestas suficiente atención, verás que te quedas sin cuerpo. Pero prestas poca atención y luego alucinas o fantaseas. Si prestas una atención intensa, los cuerpos se disolverán.

Lo físico no puede soportar la atención más allá de cierta dimensión. Si tu atención se vuelve absoluta, todo lo físico se disolverá. Solo aquello que sea realmente verdadero existirá. Esto es lo que significa ser consciente. La mente es acumulación; sin acumulación, tu mente no vale nada. La razón por la que todo el mundo está ansioso por educarse es porque quieren saber: «¿Cuánto puedo acumular, lo antes posible? ¿Cuánto puedo almacenar en mi mente?». Porque, ya sabes, tu mente no vale nada a menos que reúnas un montón de cosas. Ser consciente significa que haces a un lado todo lo que has reunido. Y simplemente eres uno con la realidad que está ahí. Simplemente eres consciente. Así que la consciencia no puede sustituirse por la atención plena. Ya sabes quién es el mejor amigo del hombre. No digas: «La mujer». El mejor amigo del hombre es el perro. Por qué el perro... Ahora, incluso el mejor amigo de la mujer es también un perro. Están siendo elevados. No se trata de un proceso evolutivo. El perro se convirtió en el mejor amigo del hombre simplemente porque, cuando este vivía en constante sensación de peligro, el perro le salvaba la vida. Porque un perro tiene mucha más atención plena que tú. Él es mucho más consciente de la realidad física que tú. Puede que tú te duermas, pero él está alerta a cada pequeño sonido, cada olor sutil, cada pequeño movimiento que ocurre alrededor.

Así que, cuando vivías en la naturaleza, cuando vivías en peligro constante, tu vida dependía del perro. Así que se convirtió en tu mejor amigo. Pero, una vez más, ahora que vives totalmente recluído en los confines de tu casa, de nuevo el perro se ha vuelto tu mejor amigo. Como te cerraste a todo y a todos, ahora el perro es el único amigo que te queda. Hazle lo que quieras, cuando vuelvas a casa al cabo de unas horas, seguirá siendo tu amigo. No hay ningún ser humano así. Si quieres, puedes experimentar. Justo antes de ir a la oficina, patéalo un poco; se asusta o se enfada y se va a sentar a algún sitio. Pero, cuando vuelves al cabo de ocho horas, volverá a ser tu amigo más querido. Ningún ser humano va a tolerar esto de ti. Si intentas algo así con alguien, estás acabado. Así que la posición del perro ha cambiado en el mundo. Es el mejor amigo, sí; pero, hoy en día, por una razón diferente a la que le corresponde habitualmente. Su cualidad es que tiene mucha más atención plena que tú, así que era un gran amigo cuando vivías en la naturaleza salvaje, cuando vivías en situaciones de peligro. Se volvió tu mejor amigo, y ahora se está volviendo tu mejor amigo por una razón completamente diferente. A cada perro le llega su momento. Pero, ¿cuándo tendrán los humanos su momento?

Nuestro momento no es cuando hayamos destruido el mundo entero y estemos sentados sobre un montón de cenizas. Ese no es nuestro momento. Cuando dominemos el mundo entero y toda la vida en este planeta: ese no es nuestro momento. Nuestro momento es cuando los árboles florecen al máximo, cuando las flores florecen, cuando los seres humanos florecen; ese es nuestro momento. «¿En cuál estación, Sadhguru? ¿En qué yuga ocurrirá?». Los estadounidenses lo pospondrán hasta la primavera. Los indios lo pospondrán hasta el próximo yuga. Tiene que llegar el satya yuga. Es decir, ya sabes, muchos miles de años después. A medida que acumulas más historia y más cultura, serás capaz de posponer las cosas miles de años. Si no tienes mucho sentido de la historia y la cultura a tu alrededor, pospondrás en términos de estaciones. «Es invierno, así que estoy sufriendo. Cuando llegue la primavera, estaré bien». Pero, cuando tienes un enorme sentido de la historia detrás y una tremenda cantidad de cultura a tu alrededor, entonces lo pospondrás miles de años; porque la memoria, la memoria cultural, se remonta muy atrás. Pero no importa si lo pospones un momento o un milenio. No hay ninguna diferencia. Porque el mañana nunca llega.

La realidad es el lugar más grandioso. Tu imaginación es una expresión constipada de la realidad.

Lo siento si sueno como James Bond. Él lo entendió, ¿está bien? En la India se está haciendo una gran broma porque un ex James Bond hace publicidad para Pan Parag. Pan Parag, para aquellos que no lo sepan, es un brebaje de nuez de betel y un poco de algún tipo de opioides y otros ingredientes, y es conocido por causar cáncer de boca en cientos de miles de personas. Ahora el ex James Bond hace publicidad para Pan Parag. Con la caja de Pan Parag, derriba gente y hace otras cosas, y descubre los secretos de los complots contra la humanidad. Definitivamente, Pan Parag es un complot contra la humanidad. El peor complot contra la humanidad es pensar que mañana será un día mejor que hoy. Este es el peor complot contra la humanidad, pensar que mañana será un mejor día que hoy. La gente lo llama esperanza; yo lo llamo inutilidad. En el momento en que piensas que mañana será un día mejor que hoy, puedes vivir en una perpetua sensación de decepción. Mañana siempre será un día mejor porque el mañana nunca llega. Te he estado contando que en Karnataka —en el sur de la India—, en las zonas rurales de Karnataka, hay una superstición por la cual creen que, al atardecer, antes de que se ponga el sol, enciendes una lámpara: debes encender una lampara. Se solían encender lámparas de aceite cuando se ponía el sol; ahora se deben encender antes de eso. Si no enciendes tu lámpara a tiempo, entonces hay espíritus malignos que están esperando para entrar en esa casa oscura sin lámpara.

Así que, solo como precaución —ya sabes, esta es una antigua forma de seguro, solo como precaución, por si acaso te tardaste en encender la lámpara de aceite y los malos espíritus entran en tu casa—, la gente siempre escribe con pintura roja en las puertas de sus casas: «Nale baa». Eso significa 'ven mañana'. Entonces, cuando vienen los malos espíritus —normalmente no tocan la puerta—, pero ven escrito eso y piensan: «Oh, esta casa es mañana». Por supuesto, quieres que vayan a la casa de tu vecino. Se irán pensando que vendrán a tu casa mañana. Porque el mañana nunca llega, los espíritus malignos nunca entran en tu casa. Es una buena lógica. Así que el mayor mal del planeta es que tengas la esperanza de que mañana será mejor que hoy. Una vez que te haces esto, estás acabado. Y empezamos a hacérselo a estos maravillosos pequeños que están sentados aquí con tanta paciencia, los queridos niños. Por desgracia, les estamos envenenando la vida, diciéndoles: «Después de que pase algo, serás maravilloso. Cuando termines tus estudios, te irá muy bien. Cuando consigas trabajo, estarás genial. Después de casarte, estarás genial». Después de que te hayas ido... seguro que será genial. No, no, no. En el momento en que creas esperanza, te vuelves inútil.

La esperanza es necesaria para las mentes que se han vuelto depresivas. Aquellos que se han convertido en esclavos de su propio pensamiento y emoción, para tales personas, la esperanza es una herramienta importante, o eso creen. Pero esta vida no necesita esperanza. Necesita exuberancia. Tiene que reverberar con todo lo que hay alrededor ahora. Y solo puede hacerlo ahora. No puede hacerlo mañana. No puedes vivir mañana. Solo puedes vivir ahora. Puedes pensar en un mañana. No digo que no debas planificar tu mañana. Pero, si estás muy exuberante, vivo y alegre en este momento, verás que se te ocurrirán cinco planes locos cada día. Si todos fracasan, te volverás aun más exuberante. Pero, si estás depresivo, no puedes completar ni un solo plan. Intentas planificar; a la mitad del plan, empiezas a vivir el plan ahí mismo. Este es el camino de una mente depresiva. Intentas planificar algo; a mitad de camino, ya empiezas a vivir el plan. Cuando empiezas a vivir lo que no es real, en algun punto está destinado a derrumbarse. Cuando se derrumbe, sufrirás. Así es como la gente puede sufrir un día que aún no existe. Pueden sufrir un mañana, ¿no es así? ¿O ya te graduaste en eso y puedes sufrir el día de pasado mañana? Si no te has graduado, sufres un mañana. Si te has graduado, sufres un pasado mañana. Si tienes un doctorado significa que sufres milenios que todavía no llegan.

Así que este proceso espiritual no consiste en volverse friki. No se trata de ir murmurando, día y noche, algo que nadie pueda entender. No se trata de adoración. No se trata de amor. No se trata de cambiar actitudes. Se trata de sincronizarte con la vida para que esta vida encuentre su existencia plena. Esto es todo lo que puedes hacer. El resto es todo mentira. Tus dioses y demonios: todo es inventado en tu cabeza. Y ahora, si has encontrado un Sadhguru, y también lo estás elevando a la divinidad, él tiene miedo de que lo claven en cualquier momento. Porque, una vez que se convierta en dios, será clavado a las paredes de tu casa. Si es una presencia reverberando en tu vida, genial. Pero te preparas para clavarlo en la pared de tu casa, y eso no sirve. Busca a otro, por favor. No me entusiasma que me claven en tu casa. No quiero ascender. Me disolveré cuando muera. ¿Te parece bien? «¡Oh, Sadhguru! Creíamos que irías al cielo y nos esperarías». No. Me disolveré; no ascenderé. No soy una promesa, soy una existencia viva. Una promesa siempre es para mañana. Ahora, si estás dispuesto, podemos reverberar juntos. Si tu vida gira en torno al mañana, puede que vayas al cielo. No me encontrarás allí, porque encontré un lugar mejor que ese. He encontrado un lugar mejor que el absurdo cielo donde comerán sin cuerpo y copularán sin cuerpo. No me gustan este tipo de fantasías. ¿Estás preparado para la realidad? ¿O quieres algo fantástico que no es real?

La realidad... «Oh, he vuelto a la realidad» significa 'he vuelto a un lugar monótono y sin sentido'. Así es como la gente ha entendido la realidad. No. La realidad es el lugar más grandioso. Tu imaginación es una expresión constipada de la realidad. ¿La realidad se alimenta de tu imaginación, o tu imaginación ha recogido algo de la realidad? ¿Cuál de las dos es? Tu imaginación recogió una pequeña pizca de realidad y cree que eso lo es todo. No. La realidad es el lugar más grandioso. «Me divertí mucho. Pero luego, cuando acabó el fin de semana, volví a la realidad». Así es como se usa la palabra «realidad». Cambiemos el contexto de esto. La realidad es lo más magnífico que está sucediendo. Así que esto es sobre la realidad. No se trata de fantasía. No se trata de esperanza. No se trata del mañana. Se trata del ahora.

Amor y bendiciones,

   

Nota del editor

¿Quieres saber qué es más valioso que el diamante más grande del mundo? En este video Sadhguru enfatiza qué es lo que realmente decide nuestra experiencia de la vida y nos invita a tomar un paso en esa dirección.