Por qué tu columna vertebral podría ser tu autopista interior hacia lo divino
Los antiguos yoguis describían la columna vertebral humana como el eje del universo. ¿Suena como una exageración descabellada? Espera un momento. Este montón de huesos que llevamos a cuestas podría ser algo más que simplemente la forma que tiene la naturaleza de mantener en posición vertical nuestro «traje de carne».
Sadhguru explica que ser humano es caminar sobre una cuerda floja entre el animal y el dios, con la columna vertebral como eje central de nuestro acto de equilibrio cósmico. En un momento, podemos abrirnos paso a codazos en un tren abarrotado y, al siguiente, explorar el origen de la existencia. Bienvenidos al desenfrenado viaje de ser humano, en el que tu columna vertebral es la pista de la montaña rusa y donde la iluminación puede estar a solo una vértebra de distancia.
Pregunta: Sadhguru, has dicho que la columna vertebral juega un papel central en nuestro crecimiento espiritual. ¿Podrías explicarlo con más detalle?
El comodín de la naturaleza humana
Sadhguru: En la tradición yóguica, la columna vertebral se denomina «merudanda» o ‘eje del universo’. Los seres humanos pueden vivir como entidades biológicas o se pueden transformar en algo así como el centro del universo. Decimos que la vida se manifiesta en tres niveles diferentes: mruga, manushya y deva. «Mruga» significa ‘naturaleza animal’, «manushya», ‘naturaleza humana’ y, «deva», ‘naturaleza divina’.La naturaleza animal está bien definida. La naturaleza divina también está bien definida. La naturaleza humana no está definida; es un flujo. En un momento dado puedes ser como un dios y, al siguiente, puedes ser como un animal. Si observas tu vida, verás que, en un momento dado, eres maravilloso y, al siguiente, repugnante. En un momento dado, actúas de manera bella y, al siguiente, de manera fea. En un momento dado, estás en paz y, al siguiente, agitado.
La naturaleza humana está entre ambas: entre la naturaleza animal y la naturaleza divina. La naturaleza humana es como un péndulo que oscila entre las dos. A veces, estás más cerca de la una; otras veces, estás más cerca de la otra. Ser humano es una posibilidad tremenda porque puedes ir a donde quieras. La vida de los animales está fijada. Haga lo que haga un animal, esa es su naturaleza. Si un tigre viene y te come, no lo llamamos asesinato porque es su naturaleza hacerlo.
Cuando un tigre nace, no tiene que sentarse a pensar cómo convertirse en un buen tigre. Si encuentra suficiente comida, crecerá y se convertirá en un buen tigre. No tiene luchas del tipo: «¿Seré un buen tigre o acabaré siendo un gato doméstico?».
Como ser humano, tú tienes que hacer muchas cosas para ser un buen ser humano y, aún así, no sabes a dónde perteneces. A nivel social, comparado con otra persona, puedes pensar que estás bien. Pero, por ti mismo, no sabes realmente a dónde perteneces porque la naturaleza humana no es definida. Esta es la parte más hermosa de ser humano. Esta es tu libertad.
La paradójica carga de la libertad
Ahora mismo, la gente no sufre su esclavitud, sino su libertad. Si sufres tu esclavitud, está bien. Si sufres tu libertad, es una verdadera tragedia. Pero, ahora mismo, sufres tu libertad. Como tu naturaleza no está determinada y se te ha dado esta libertad, puedes hacer cualquier cosa de ti. Eso es con lo que estás luchando.
En este contexto, la columna vertebral es una dimensión tuya que determina la dirección que tomas. El modo como funciona tu columna vertebral, y las energías dentro de ella, lo determina casi todo respecto hacia dónde vas.
En términos de la estructura física de la columna vertebral, hay dos huecos a cada lado de la columna vertebral, que son los conductos por los que pasan todos los nervios. Estos huecos son el ida y el pingala, los canales derecho e izquierdo que representan las dualidades de la creación. Están conectados con los dos lados del cerebro.
Hoy en día, la ciencia médica también identifica el cerebro izquierdo y el derecho. Son el ida y el pingala. En el Lejano Oriente, los llaman yin y yang. En el hinduismo tradicional, los llaman Shiva y Shakti. Se les conoce con varios nombres. Fundamentalmente, estos diversos nombres se refieren a las dualidades de la existencia, que forman la base de la realidad física.
Los canales de energía de la columna vertebral y su significado espiritual
Además de esto, hay un espacio «vacío» que atraviesa el centro de la columna vertebral. Es el sushumna. Equilibrar el ida y el pingala te asentará adecuadamente en esta vida, lo que te hará eficaz en el mundo y capaz de manejar bien los diferentes aspectos de la vida. Si tus energías entran en el sushumna, puedes aportarle diversas cualidades.
Fundamentalmente, el sushumna no tiene atributos ni cualidades propias. Es como el espacio vacío. Donde hay espacio vacío, puedes crear lo que quieras. Una vez que tus energías entran en el sushumna, decimos que alcanzas vairagya. «Raga» significa ‘color’; «vairagya» significa ‘incoloro’. «Incoloro» significa que te has vuelto transparente.
El espectro ilimitado y el prisma de la vida
La ventaja de ser transparente es que, si lo que hay detrás de ti es rojo, tú también te vuelves rojo; si es azul, tú también te vuelves azul; si es amarillo, tú también te vuelves amarillo. No tienes prejuicios. Entre la gente roja, puedes ser totalmente rojo, pero el rojo no se te pega. Eres rojo porque eres transparente. Entre la gente verde, puedes ser totalmente verde, pero el verde tampoco se te pega. Vayas donde vayas, te conviertes en eso, pero no se te pega nada.
Solo si estás en un estado de vairagya te atreverás a explorar todas las dimensiones de la vida. Si algún color se te pega, te resistirás a entrar en los otros. Si se te pega el rojo, te resistirás a entrar en el verde. Si se te pega el verde, te resistirás a entrar en el azul. Cualquiera que sea el que se te pegue, te resistirás a entrar en el siguiente porque desarrollarás un prejuicio sobre lo que está bien y lo que está mal, sobre lo que es correcto y lo que no. Esto restringirá el flujo de la vida.
Este mecanismo está integrado de manera fundamental en la columna vertebral; no en el cerebro. Si manipulas la columna vertebral de determinadas maneras, se puede cambiar en gran medida el funcionamiento de la mente y el cerebro. Solo con tocar tu columna vertebral, yo podría hacer estallar tu mente porque la columna vertebral es la raíz. En general, en la vida, excepto para dormir, es bueno mantener la columna vertebral erguida. Eso, por sí mismo, hará muchas cosas por ti.