Veeramuthuvel, cuando era estudiante

Un sueño hecho realidad

Como estudiante de ingeniería, alimenté un sueño: trabajar en el ámbito espacial, en la ISRO. Pero me costó algunos años conseguirlo. Después de terminar mi Maestría en Ingeniería Mecánica, pasé algunos años en una empresa privada y luego en Hindustan Aeronautics Limited (HAL), en Bengaluru. Durante este periodo, nunca perdí de vista mi destino final: la ISRO.

En 2004, finalmente vi cumplido mi sueño. Desde entonces, he tenido el privilegio de trabajar en una serie de desafiantes proyectos en un entorno multidisciplinario como la ISRO. Ha sido una inmensa experiencia de aprendizaje pues me asignaron varios proyectos sobre satélites de teledetección, la misión Orbitador de Marte —también llamada Mangalyaan— y, más recientemente, Chandrayaan-2 y Chandrayaan-3. Durante este periodo, en 2011, me incorporé al IIT (Instituto Indio de Tecnología) de Madrás y completé mi doctorado.

En una misión a la Luna

Tras el éxito del orbitador de Marte, nuestra atención se centró en la Luna y fui nombrado director adjunto del proyecto Chandrayaan-2, en el que tuvimos que asumir un contratiempo al no poder aterrizar con éxito en la superficie lunar. Ahora, el gobierno de la India me ha encomendado otra misión: la Chandrayaan-3. En noviembre de 2019, el presidente de la ISRO y el director de mi centro me nombraron director del proyecto para esta próxima misión a la Luna.

Antes de embarcarme en este trascendental y desafiante viaje, busqué la bendición de Sadhguru. Tuve la buena fortuna de conocer personalmente, junto a mi esposa, a Sadhguru en el Centro de Yoga Isha y de recibir sus bendiciones y buenos deseos para el éxito de este proyecto. Nuestro objetivo es hacer un aterrizaje suave en la superficie lunar y convertirnos en el cuarto país del mundo en conseguirlo tras Estados Unidos, China y Rusia.

                                                                     Chandrayaan

La experiencia interior frente a la investigación espacial

Aunque la exploración espacial ha progresado y los científicos de todo el mundo intentan explorar el espacio exterior con la ayuda de la tecnología más avanzada, lo que conocemos sobre el espacio exterior sigue siendo muy limitado si lo comparamos con los místicos, quienes poseen percepciones fascinantes y profundas relativas a nuestro espacio interior y exterior.

Hemos estado enviando satélites a la Luna, a Marte, e incluso hemos planeado ir a Venus. He leído las mejores revistas científicas, mis trabajos de investigación han sido publicados en revistas de gran reputación, e incluso, como director del proyecto Chandrayaan-3, he pasado mucho tiempo estudiando la construcción de un vehículo de aterrizaje, cómo lograr un aterrizaje seguro y suave en un terreno desconocido, y cómo perfeccionar la tecnología satelital. He conocido la tecnología de punta, pero aún así, diría que la exploración y la información que hemos reunido sobre otros planetas es bastante limitada.

Escuchar a Sadhguru hablar sobre estos temas me ha llevado a darme cuenta de que todo lo que él sabe procede de su experiencia y está más allá de lo que nosotros podemos comprender en este momento. Creo que el yoga o el ir hacia el propio interior es la mejor manera de obtener un profundo conocimiento experiencial de todo, incluso del espacio. La comunidad científica tendrá, en cambio, que invertir mucho dinero y tiempo para comprender el espacio exterior, e incluso entonces, el conocimiento adquirido quizás sea muy limitado.

El inicio de mi exploración interior

En 2009, conocí Ingeniería Interior a través de uno de mis amigos, quien también era mi compañero en la maestría. Observé un notable cambio en él cuando empezó a realizar sus prácticas diarias. También me dijo que se sentía mucho mejor y eso me hizo pensar. Un día me llevó al evento de Mahashivratri. Permanecí despierto toda la noche, participé en la meditación de medianoche y sentí un intenso deseo de aprender Ingeniería Interior. La siguiente vez que se ofreció el curso, me inscribí. Al finalizar el curso, al séptimo día, pude percibir muchos cambios en mi interior.

Hasta ese momento, ni siquiera había sido consciente de todos esos aspectos de mi espacio interior. Continué con mi práctica dos veces al día durante los 40 días estipulados, y me sentí estupendamente. Entonces quise explorar aún más: todos los cursos avanzados. Al mes siguiente, asistí a un programa de Hatha Yoga y, al mes siguiente, seguí con Bhava Spandana.

Como era el director de proyecto de numerosos satélites, no podía ausentarme con frecuencia. Así que planifiqué con antelación y visité el Centro de Yoga Isha en las semanas en que tenía libre los viernes. En estos largos fines de semana asistí a los programas de Isha, a las puyas, fui voluntario en el Centro de Yoga, y completé varios cursos: Shakti Chalana Kriya, la meditación Shoonya y Samyama. Poco después, también me incorporé a la asociación Ishanga con Sadhguru y empecé a contribuir con varios proyectos de Isha en beneficio de la gente.

Aunque mi trabajo en ISRO me impide ahora ser voluntario, hago regularmente mis prácticas de dos horas y eso me mantiene estable y alejado de las preocupaciones.

Isha Samskriti: el despegue perfecto para un niño

Después de que empecé a visitar el Centro de Yoga Isha y a realizar mis prácticas diariamente, mi esposa también se animó y asistió en 2010 a un Retiro de Ingeniería Interior en el Centro de Yoga. Eso fue un punto de inflexión para ella, y se convirtió en una ferviente seguidora de Isha. Ella ha realizado gran cantidad de voluntariado en el Centro de Yoga. Y cada día empezamos juntos nuestra sadhana a las 5 de la mañana con la Gurú Puya.

En nuestras visitas, desde 2009, al Centro de Yoga quedamos bastante impresionados con el estilo de educación de Isha Samskriti y el profundo impacto que tiene en sus estudiantes. Esto nos llevó a tomar una decisión: inscribir a nuestra hija en Isha Samskriti. En realidad, era mi mujer la que tenía más interés en llevar a cabo esta decisión.

Yo he estado en los mejores institutos de enseñanza, como el Instituto Nacional de Tecnología (NIT) y los Institutos Indios de Tecnología (IIT); me he doctorado; con el Programa de Estudios Espaciales, y para conferencias internacionales, he visitado numerosos países como Estados Unidos y Canadá; y ahora trabajo en una institución de primera fila como la ISRO. Pero este enfoque tradicional de Isha Samskriti siempre me ha fascinado.

Un día escuché a Sadhguru hablar sobre este tema y eso me impresionó aún más. Él decía que los estudiantes de Isha Samskriti no son para la universidad: son para el universo. Esta idea me conmovió. También dijo que, si se le proporciona la atmósfera adecuada y apoyo para su crecimiento mental y físico, un niño se desarrollará de forma natural y dará lo mejor de sí mismo en cualquier circunstancia en que se le coloque.

Cuando yo estaba en la escuela, y posteriormente durante mis estudios superiores, no era consciente de ello. Así que pensé que esta sería la mejor manera de preparar a mi hija para los retos del futuro, aunque sé que no va a ser ingeniera o médica.

Una atmósfera óptima para el desarrollo de mi hija

Por supuesto que echo de menos a mi hija cuando está en Isha Samskriti, pero me consuelo sabiendo que está en un espacio consagrado. Eso es, por sí mismo, una bendición, y también el hecho de que está dando lo mejor de sí misma. Durante su descanso anual de 21 días disfrutamos de su compañía y, cuando llega el momento de su partida, me emociono mucho. Pero es por el bien de nuestra hija quien lleva seis años ya en Isha Samskriti.

Veo una gran transformación cada vez que viene a casa. No duda en hacer ningún trabajo y lo hace todo con plena concentración e involucramiento. Siempre que regresa a casa, nos habla de su estancia, de las cosas nuevas que ha aprendido, como por ejemplo alguna danza clásica. Fue una delicia verla interpretar Bharatanatyam para nosotros. Nos reconforta y alienta ver todas estas buenas cualidades y habilidades que ha adquirido. Valoramos más su desarrollo integral que la educación formal que reciben la mayoría de los niños.

Nota del editor
¿Estamos solos en el universo? En este video, Sadhguru responde a una pregunta que ha preocupado a generaciones de astrónomos y astrofísicos por igual.

Para más información sobre Isha Samskriti (en inglés)
Teléfono: +91 0422 2515480, +91 94426 16138
Correo electrónico: isha.samskriti@ishafoundation.org