Sadhguru analiza por qué es importante que todas las sociedades otorguen un espacio para que florezca lo femenino.

Sadhguru: Durante mucho tiempo, la humanidad le ha dado demasiada importancia a lo masculino, porque la supervivencia ha sido el factor dominante. Lo masculino será, naturalmente, la fuerza dominante cuando la supervivencia es un aspecto dominante. Es solo cuando las sociedades manejan bien su supervivencia y alcanzan un cierto nivel de cultura y civilización estabilizadas, que lo femenino puede llegar al lugar que le corresponde. Hoy en día, las sociedades están llegando a esa fase, pero la economía se ha convertido en la fuerza principal en el mundo.

Es solo en una cierta situación de relajación que puede florecer lo femenino. Y, si lo femenino no florece, tendrás todo en tu vida y no tendrás nada en tu vida.

Cuando la economía es el factor dominante, una vez más, reduciremos todo al nivel de la supervivencia. Puede parecer un poco diferente, pero todavía se trata de supervivencia. La ley de la selva: la supervivencia del más fuerte. Una vez que haces eso, dominará lo masculino.

Es solo en una cierta situación de relajación que puede florecer lo femenino. Y, si lo femenino no florece, tendrás todo en tu vida y no tendrás nada en tu vida. Es esencial promover conscientemente lo femenino en una sociedad porque, sin eso, tendrás árboles maduros que nunca florecerán. Eso es como vivir una vida a medias. Una vida a medias no es una buena vida.

Por masculino y femenino, no quiero decir hombre y mujer. Lo femenino puede estar tan vivo en un hombre como en una mujer. No se trata de ser físicamente hombre o mujer. Lo femenino es una cierta cualidad. Lo masculino también es una cierta cualidad. Solo cuando estas dos cualidades suceden en equilibrio dentro de un ser humano, puede un ser humano vivir una vida de realización.

Hoy en día, existe el peligro de que la mujer renuncie a lo femenino porque la supervivencia se ha convertido, una vez más, en un factor muy dominante y la supervivencia ha sido elevada a una escala muy exigente, como nunca antes. Anteriormente, sobrevivir significaba simplemente conseguir la comida del día. Hoy en día, sobrevivir significa un Mercedes o un BMW; eso es muy desafiante. Si esto continúa, no habrá espacio para lo femenino en la sociedad.

Es muy esencial que celebremos lo femenino. Esto no se trata de la mujer, se trata de lo femenino.

Garantizar que haya lugar para lo femenino debe promoverse desde la escuela. Los niños deben dedicarse a la música, al arte, a la filosofía o a la literatura tanto como a la ciencia y a la tecnología. Si esto no sucede, no hay lugar para lo femenino en el mundo. Puede que seas mujer, pero te volverás masculina.

Por lo tanto, es muy esencial que celebremos lo femenino. Esto no se trata de la mujer, se trata de lo femenino. Si quieres usar una analogía, si la raíz es lo masculino, la flor y el fruto son lo femenino. El propósito mismo de la raíz es producir la flor y el fruto. Si eso no sucede, la raíz se desperdiciará. La supervivencia por sí sola no se encarga de todo. Después de eso, tienen que sucederte las cosas más bellas de la vida.

Si lo femenino no cobra vida en ti, ya seas un hombre o una mujer, nunca te sucederán las cosas más bellas de la vida. Toda tu vida, solo pensarás en la supervivencia: supervivencia sin fin. Solo harás que la supervivencia sea cada vez más difícil. Esta es la naturaleza misma de lo masculino. Lo masculino siempre se trata de conquistar algo. Lo femenino no se trata de conquista. Lo femenino se trata de florecer, relajarse y vivir, no de obtener algo. Este cambio tiene que suceder.